Aerotermia retrofit

Cada vez más hogares buscan alternativas sostenibles y eficientes a las calderas tradicionales de gas o gasóleo. La aerotermia es una de las tecnologías más demandadas por su capacidad de ofrecer calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria (ACS) utilizando la energía del aire exterior.

Pero cuando surge la idea de hacer el cambio, muchos propietarios se preguntan 👉 “¿Tendré que levantar el suelo o sustituir todos mis radiadores?” La buena noticia es que no siempre es necesario. Gracias a la modalidad aerotermia retrofit, es posible aprovechar buena parte de la instalación existente y sustituir únicamente la caldera por una bomba de calor aerotérmica, evitando obras costosas y reduciendo el tiempo de instalación a unos pocos días.

Hoy te explicamos en qué consiste exactamente el sistema retrofit, qué ventajas ofrece, cuáles son sus limitaciones y qué estrategias puedes aplicar para obtener la máxima eficiencia energética sin grandes reformas.

¿Qué significa “aerotermia retrofit”?

El término retrofit hace referencia a la adaptación de tecnologías modernas en infraestructuras existentes. Aplicado a la aerotermia, significa sustituir la antigua caldera de gas, gasóleo o propano por una bomba de calor eléctrica sin necesidad de cambiar toda la instalación de calefacción.

En otras palabras, se aprovechan los emisores de calor actuales (radiadores, fancoils o incluso suelo radiante) y la red de tuberías existente. El resultado: una reforma rápida, limpia y mucho más económica, que permite empezar a disfrutar de un sistema de climatización eficiente y sostenible casi de inmediato.

La aerotermia retrofit es ideal para viviendas que ya cuentan con radiadores o circuitos de calefacción hidráulica, y buscan reducir el consumo energético y las emisiones sin embarcarse en obras mayores.

Ventajas de instalar aerotermia en modo retrofit

Una de las mayores ventajas del sistema retrofit es que ofrece todos los beneficios de la aerotermia, pero con una inversión inicial menor y una instalación más sencilla. Entre sus principales ventajas destacan:

Ahorro en obra y materiales

No es necesario levantar suelos, cambiar tuberías ni rehacer el sistema hidráulico. Solo se sustituye la caldera por la bomba de calor, lo que reduce significativamente el coste total.

Menor tiempo de instalación

Mientras una instalación completa de aerotermia puede tardar semanas, el retrofit se realiza en apenas unos días. Esto permite disfrutar de calefacción renovable casi de inmediato.

Aprovechamiento de los radiadores existentes

En muchos casos, los radiadores actuales son compatibles con aerotermia si se ajustan las temperaturas de impulsión. Con una configuración adecuada, se puede mantener el confort sin sustituir todos los emisores.

Reducción de emisiones desde el primer día

Al eliminar el uso de combustibles fósiles, la huella de carbono de la vivienda disminuye de manera inmediata. Esto contribuye directamente a la descarbonización del hogar.

Posibilidad de integración con energía solar fotovoltaica

La combinación de aerotermia retrofit + placas solares permite reducir aún más la factura eléctrica y alcanzar un nivel de autosuficiencia energética muy elevado.

En resumen, la aerotermia retrofit es la opción perfecta para quienes desean modernizar su sistema de calefacción de forma rápida, limpia y sostenible.

Limitaciones a tener en cuenta antes de instalar aerotermia retrofit

Aunque el retrofit ofrece grandes ventajas, no todas las viviendas son aptas sin una evaluación previa. Es fundamental considerar varios factores antes de realizar el cambio:

Temperatura de impulsión

Las calderas tradicionales trabajan con agua a 70–80 °C, mientras que las bombas de calor funcionan mejor a temperaturas entre 35 y 55 °C.

Si la vivienda tiene radiadores diseñados para altas temperaturas, puede ser necesario ajustar el sistema o sustituir algunos emisores para mantener el confort en los días más fríos.

Aislamiento térmico de la vivienda

Un mal aislamiento puede provocar pérdidas de calor que reduzcan el rendimiento de la bomba de calor. Si la vivienda no está bien aislada, la demanda energética será mayor y el sistema perderá eficiencia.

Sustitución parcial de radiadores

En algunos casos, basta con cambiar los radiadores de las estancias principales por modelos de baja temperatura, manteniendo el resto. Esta medida mejora la eficiencia sin necesidad de renovar toda la instalación.

Dependencia de la tarifa eléctrica

Al eliminar los combustibles fósiles, la aerotermia depende completamente de la electricidad. Por ello, elegir una tarifa eléctrica con discriminación horaria o combinarla con autoconsumo solar será clave para garantizar el ahorro.

Estrategias para maximizar la eficiencia en una instalación retrofit

Para obtener el máximo rendimiento y confort con una instalación retrofit, conviene aplicar algunas estrategias de optimización:

✔️ Sistema híbrido con la caldera existente

En zonas de clima muy frío, puede mantenerse la caldera tradicional como apoyo. De este modo, la aerotermia cubre la mayor parte del año, mientras la caldera solo se usa en picos de demanda.

✔️ Sustitución selectiva de radiadores

Cambiar solo los radiadores de las habitaciones más utilizadas por modelos de mayor superficie o baja temperatura mejora la distribución térmica sin aumentar el gasto de instalación.

✔️ Uso de depósitos de inercia

Un depósito de inercia ayuda a estabilizar la temperatura del circuito y evita los arranques y paradas frecuentes del compresor, lo que prolonga la vida útil del equipo y reduce el consumo eléctrico.

✔️ Optimización de la curva climática

La curva climática ajusta automáticamente la temperatura del agua impulsada según la temperatura exterior. Configurarla correctamente permite mantener el confort con el menor gasto energético posible.

Ejemplo práctico de ahorro con aerotermia retrofit

Veamos un caso real comparando un sistema de calefacción tradicional con uno retrofit:

💡 En este ejemplo, el cambio a aerotermia retrofit supone un ahorro anual de unos 900 € y una reducción del 75 % en emisiones de CO₂, manteniendo el mismo nivel de confort.

Conclusión: moderniza tu calefacción sin obras con aerotermia retrofit

La aerotermia en modalidad retrofit es la solución ideal para quienes desean dar el salto a la eficiencia energética sin afrontar reformas costosas. Permite aprovechar la instalación existente, reducir las emisiones y disfrutar de un confort térmico estable durante todo el año.

Eso sí, es fundamental realizar un estudio previo de compatibilidad para garantizar que los radiadores, el aislamiento y la potencia eléctrica del hogar sean adecuados. Con una correcta planificación, el sistema retrofit se convierte en una inversión segura, rentable y sostenible.

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